Tarragona: ideas y alojamiento

Tarragona es una de las poblaciones de España que cuenta con un importante pasado histórico donde los romanos fueron los principales protagonistas. En la actualidad, se puede visitar una gran variedad de monumentos construidos durante el Imperio Romano y que hoy en día son algunas de las joyas más destacadas del patrimonio español. Está bañada por las aguas del Mediterráneo, lo que hace que el turismo cultural no sea su principal atractivo.

Y es que los visitantes podrán disfrutar de hermosas y tranquilas playas y un clima suave durante gran parte del año. Además, hay apartamentos a pie de playa, en el centro o en zonas bien comunicadas. Su cercanía con otras poblaciones costeras como Salou, Cambrils o La Pineda, lo convierten en uno de los destinos favoritos por aquellos que quieren hacer una escapada a la Costa Dorada.

Tarragona se encuentra bien comunicada con Barcelona, y apenas se tarda una hora en coche.

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Pasado romano

• Forum. Antiguamente era un espacio público en el que los romanos hacían sus transacciones comerciales, servía como punto de encuentro y tenían lugar las diversas reuniones relacionadas con el ámbito político.

• Circo. En el siglo I d.C. el emperador Domiciano mando construir el circo de la ciudad donde tenían lugar las famosas carreras de carros tirados por caballos. Hoy en día, aquí es donde está emplazado el Ayuntamiento de Tarragona y el Convento de Santo Domingo.

• Muralla. Así como muchas ciudades españolas como Zaragoza o Ávila que todavía hoy en día conservan sus antiguas murallas romanas, Tarragona es otra de estas poblaciones. En la actualidad, quedan en pie tres torres que datan del siglo III dentro del tramo que mejor se conserva.

Anfiteatro

• Basílica visigótica. Aunque antiguamente el lugar en el que hoy podemos encontrar esta iglesia correspondía al anfiteatro romano, tras el periodo de ocupación romana se construyó este templo visigótico.

• Necrópoli. Los romanos, durante los siglos III y IV, construyeron lo que hoy conocemos como necrópolis.  Sirvió como lugar de culto a San Fructuoso.
• Iglesia románica. Muchos siglos después de la caída del Imperio Romano, los cristianos construyeron este pequeño templo religioso dedicado a Santa María del Miracle.